Hokkaido

Declarada “monumento natural” y protegida por las autoridades japonesas, la raza Hokkaido se caracteriza por su fidelidad y resistencia. Descubrimos a estos perros activos y espontáneos.

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Origen

En el siglo XII, habitantes japoneses emigraron a la segunda isla más grande de Japón y llevaron consigo varias razas de perros medianos. De ellos surge la raza que hoy nos ocupa, y que lleva por nombre el de su lugar de origen: Hokkaido.

En 1937, las autoridades japonesas declararon a la raza Hokkaido como “monumento natural” y les otorgó protección mediante una ley que ampara a las razas Akita, Shiba y Shikoku, entre otras.

Estos ejemplares también son conocidos como “Ainu-ken” (por el gentilicio de su lugar de procedencia) y originalmente fueron criados para la cacería de animales salvajes.

Físico

Los perros Hokkaido son de un tamaño mediano, fuertes y con buenas proporciones; se caracterizan por ser musculosos y claramente definidos. Su estructura les permite movimientos ágiles y rápidos.

Los Hokkaido tienen una doble capa de pelo que les protege de las temperaturas más frías: la capa externa es dura y ofrece una excelente resistencia a las condiciones extremas, mientras que la interna es suave y de mucha densidad. En este sentido guarda similitudes con el perro Eurásico del que ya les contamos.

Un Hokkaido macho mide entre 48,5 y 51,5 cm (altura a la cruz) mientras que las hembras miden entre 45,5 y 48,5 cm. El peso promedio es de unos 20 kg.

Carácter

“¿Qué tipo de perro me llevo a casa si adopto un Hokkaido?”, nos preguntan. Quienes opten por uno de estos perros tendrá un compañero noble, fiel y muy atento: el Hokkaido es reconocido por su espontaneidad, coraje y resistencia.

Suele ser obediente aunque puede mostrar cierta independencia si algo llama demasiado su atención; muchos expertos señalan que no es aconsejable dejarlo jugar libremente con otros animales, dado que puede hacer gala de su instinto de cazador.

Cuidados necesarios

Es preciso recordar que esta raza fue concebida para la cacería de animales salvajes, por lo que se trata de perros activos que requieren una buena dosis de ejercicio. También necesitan sombra y protección en el verano, dado que naturalmente están adaptados a climas fríos.